El compañero Agustín Ortega, miembro del departamento de Filosofía y Ciencias Humanas del ISTIC, ha publicado recientemente su tesis con el título Psicología y Sociología en sus bases antropológicas-éticas. Hacia una guía de las ciencias sociales y filosofía en una educación-formación liberadora integral (ULPGC, 2014)
Según el propio Ortega: "el estudio trata de presentar como las ciencias sociales, en lo más valioso de
sus orígenes e identidad, trataron de estudiar la relación entre la persona con
su sociedad-mundo, con la realidad socio-histórica para mejorarla y
transformarla. Lo más cualificado y vivo de las ciencias sociales, como son la
psicología y la sociología- tal como muestra por ejemplo la psicología social-,
trataron de articular, conocer o comprender y transformar la realidad humana,
comunitaria y social de forma global. Con en sus dimensiones o aspectos
personales y culturales, sociales e históricos. Un conocimiento, compresión y
transformación de la persona y de la realidad social, de su conciencia o psique
y de la estructural social, de la conducta y del sistema socioeconómico-político,
de lo espiritual o ético y de lo histórico.
Es una ciencia
social que, más allá de toda imposible neutralidad o asepsia en lo humano,
tiene de fondo una filosofía y cosmovisión de la persona, una base
antropológica y ética. Es, pues, una ciencia social con conciencia moral y
compromiso ético por un efectivo conocimiento y transformación de la realidad
humana, social e histórica, por una humanidad con más libertad y justicia, mas
solidaridad y fraternidad. Una ciencia social que promueve el desarrollo y
protagonismo universal de las personas, con su vida y dignidad, la promoción y
liberación integral con los pobres (oprimidos, víctimas y excluidos) de la
tierra que son los sujetos, los protagonistas principales de la transformación
social e histórica.
Todo ello
contra todo mal, injusticia y opresión contra las personas. Tal como impone el
neoliberalismo-capitalismo que es inhumano e inmoral por naturaleza y que con
su individualismo e ídolos del mercado, del beneficio y de la competitividad:
niega la ética y la solidaridad, la justicia e igualdad; causa injusticia y
alienación, deshumanización o patologías de todo tipo y que, en este sentido,
no quiere cambiar la estructura social y el sistema económico injusto Como hizo
también esa mala repuesta al capitalismo, como es el comunismo colectivista o
colectivismo, de tipo leninista-stalinista, que niega la libertad y el
participación democrática, que no contempla el cambio personal y espiritual o
moral en sentido amplio.
Como se
observa, estas ciencias sociales tienen de fondo una filosofía, ética y
antropología solidaria e integral, en la línea de corrientes y autores muy
significativos de nuestra época. Tales como los humanismos y teorías críticas,
el nuevo pensamiento judío y el personalismo comunitario, el pensamiento
liberador como el latinoamericano o del resto del Tercer Mundo (Sur empobrecido).
Los cuales, en muy buena medida, han sido inspirados por la fe judeo-cristiana
y católica que ha sido esencial, decisiva en la historia de la filosofía y del
pensamiento social que, asimismo, es la base en la génesis y desarrollo de las
ciencias sociales. La acción-formación social, antropológica y ética, una
educación cualificada integral y liberadora, tiene su raíz en la espiritualidad
y mística. En donde la fe cristiana, con su pensamiento social y
antropológico-moral, es entraña y fuente de donde siempre hay que beber. Para
que hay vida y vida en abundancia."